Nuestros ojos relevan nuestras intenciones y nuestros pensamientos
Nuestros ojos relevan nuestras intenciones y nuestros pensamientos; solo hay que estar ante un entendido para que lo interprete, es muy fácil predicar con nuestras palabras la buena conducta y el amor, pero con los hechos es casi imposible hacerlo, entonces eso nos hace actuar como un metal que resuena vacío de conceptos y deidad.